Ana, de 50 años, atravesaba un periodo difícil. Después de una reciente separación y algunos cambios importantes en su carrera profesional, comenzó a sentir que la ansiedad la controlaba. Las preocupaciones constantes sobre el futuro, el miedo al cambio y la sensación de haber perdido su rumbola hacían sentir perdida y sobrepasada. Decidió buscar ayuda y comenzó terapia con Paty Zapata, lo que le permitió explorar sus emociones a fondo.
Desde el inicio, Paty ayudó a Ana a identificar las raíces de su ansiedad. A través de herramientas terapéuticas como la reestructuración cognitiva y el análisis de patrones emocionales, Ana pudo entender cómo sus pensamientos y creencias limitantes sobre el envejecimiento, el cambio y la autovaloración estaban alimentando su ansiedad. A medida que profundizaban en su historia, Ana descubrió que gran parte de su malestar provenía de la presión que se había impuesto a sí misma para cumplir con expectativas ajenas, lo que la había alejado de su verdadera identidad.
El trabajo con Paty le permitió a Ana reconectar con sus deseos y necesidades personales. Aprendió a manejar la ansiedad mediante técnicas de gestión emocional y mindfulness, lo que le permitió encontrar momentos de paz en medio del caos. Además, Paty la guió en un proceso de reflexión profunda sobre su identidad y su propósito, ayudándola a redescubrir sus pasiones y objetivos personales, más allá de los roles y expectativas externas.
A medida que avanzaba en la terapia, Ana comenzó a sentirse más segura de sí misma y menos abrumada por el futuro. Hoy, después de meses de trabajo, ha aprendido a gestionar su ansiedad de forma más consciente y equilibrada, reconociendo sus emociones sin que estas definan su vida. Ana dejó atrás los miedos que la paralizaban y logró avanzar con mayor claridad, tranquilidad y una nueva comprensión de sí misma.